Sinceramente, tener esta pequeña ventanita abierta en Internet y no
manifestarse sobre cosas que a personas decentes (independientes de ideologías)
les remueven las tripas me parecería un auténtico desperdicio. Aquí no hablamos
del “Titiritero” de Serrat que llevaba por los pueblos de España
entretenimiento, diversión y cultura popular. Aquí hablamos de los falsos
“Titiriteros” que en Madrid, durante un acto donde acudieron muchos niños,
hicieron de su capa un sayo y rociaron sus perversos guiñoles de apología del
terrorismo etarra y de otras lindezas de no menor perversidad. Sus colegas de
ideología tales como Ada Colau, Pablo Iglesias, Alberto Garzón, Teresa
Rodríguez y el inefable Willy Toledo ya han mostrados su solidaridad con estos
“Titiriteros” y demandan su pronta libertad (es de suponer que, ante la
posibilidad de repetirse las Elecciones”,
los veremos con sus “Guiñoles” en algún mitin de PODEMOS. Tiempo al
tiempo). ¿En esto consiste la
Libertad de Expresión para algunos? ¿En rendirles pleitesía, con el testigo de
niños, a criminales sin más méritos contraídos que el tiro en la nuca; los
secuestros o las bombas en coches aparcados en la vía pública o en cuarteles de
la Guardia Civil? Si algo tiene de positivo situaciones como
las vividas en Madrid (con sus posteriores pronunciamientos) es que nos dejan
“verles asomar la patita”. Una encuesta del pasado fin de semana en el Diario
“El País” dejaba como pacto más reconocible y deseado el que podrían formar
PSOE y CIUDADANOS. Esto es síntoma inequívoco de que la gente empieza a ver el
bosque de la verdad por encima de los árboles de la demagogia. El tema cultural del Ayuntamiento de Madrid se
le está indigestando por día a doña Manuela Carmena (de la que por cierto
siempre he tenido un buen concepto como persona y jurista) y parece ser que, a
nivel cultural, en la Villa
y Corte detrás de lo malo viene lo peor. A mis años y con un intachable currículo de
demócrata y firme luchador por las libertades pocas cosas me pueden enseñar
estos advenedizos de tres al cuarto. Se mueven con una falsa impostura
intelectual y cual nuevos Mesías vienen prestos y gozosos a nuestro rescate.
Puede que dada las similitudes de fatuos guiñoles sea coherente que se muestren
solidarios con estos falsos titiriteros.
Por sus guiños y actos los conoceréis.
Juan Luis Franco – Lunes Día 8 de Febrero del 2016
Bastante desafortunado, sobre todo para alguien que se autodenomina socialdemócrata de pro. Está más cerca de la derecha de lo que se piensa. Para empezar, le falta información acerca de la obra sobre la que opina, y en las circunstancias en las que ocurrió (que no es para niños es evidente). Ver deseable un acuerdo con ideales totalmente liberales, como es el acuerdo con CIUDADANOS, no es más que ser liberal. Un saludo.
ResponderEliminarContestación a Anónimo:
ResponderEliminarTiene usted la razón que da el expresarse libremente y con respeto. No suelo contestar los pocos comentarios que se dan en este modesto Blog pero hago una excepción en consonancia con el grado de civismo que usted me demuestra. Puede que sea verdad que a la vejez me ha haya vuelto de Derechas y además Liberal. Cosas más raras se han visto (también estoy a la espera de enterarme que ideología política profesa PODEMOS). De lo que si estoy completamente seguro es de las cosas que no soy (ni he sido nunca). La Izquierda de mi ya lejana juventud (en pleno franquismo) era emocionalmente más de fondos que de formas. La de hoy, disculpe si la veo desde el prisma de un “Liberal”, es todo lo contrario. Vivimos la etapa dorada de los transgresores que no es más que, a través del exabrupto, la negación de un verdadero talento creativo y, lo más grave, una falta de compromiso con los más desfavorecidos. Como viejo socialista permítame que me sitúe en las antípodas del “Populismo”. Mis más cordiales saludos.