Se nos fue el gran Franco Battiato. Nos deja una hermosa lección de como se puede armonizar en la música la belleza estética con el compromiso ético. En la Hacienda de La Fuenlonguilla de la Puebla de Pepe Menese y Diego Clavel los candiles de aceite mecen sus llamas a golpes de Soleá. Por el Cortijo del Cuarto en las noches de verano el polvo de estrellas se desparrama sobre las cigarras cantarinas. En la lebrijana Plaza del Hospitalillo el espíritu de La Perrata y El Pinini aflamencan las sombras donde duermen los mejores caracoles del mundo. La Ciudad de Cernuda y Vallejo se despereza añorando la vida no vivida. Una diputada del PP afirma que el origen del Flamenco está en Madrid. Pues nada, a partir de ahora a la Soleá de Alcalá habrá que llamarla Soleá de Carabanchel Alto. El Paro y la miseria campan a sus anchas por la Tierra de María Santísima mientras que los "Depositarios de las Esencias " tienen como principal problema como ha quedado la Plaza de la Magdalena. El Gobierno combate las colas del hambre de hoy programando la España del 2050. La Oposición culpa al Gobierno hasta de los calores prematuros. Suenan los clarines se la Maestranza para recordarles a algunos que la Fiesta de los Toros o es Rito y Tradición (pueblo) o no es nada. Aquí, en la Ciudad, los gatos ladran y los perros maullan y hasta El Giraldillo es una mujer. Un mundo, mágico y hermoso, siempre buscando la salida. Es decir: Sevilla y las Siete Revueltas.
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