Ignoró lo que le decían los voceros
padeciendo miopía en las entrañas;
espécimen oriundo de esta España
nació y vivió solo para contar dinero.
Hombre sin Dios reciclado en usurero
decía ignorar lo que pasaba fuera
agarrado febrilmente a su cartera.
Hoy, don Pedro revestido de mortaja,
envuelto con su ruán en una caja
se marchará sin alma ni frontera.
(de “Las Siete
Revueltas” – 2011)
Sigo disfrutando de ese magnífico poemario tuyo, "Las siete revueltas". Me gustaria tenerlo y dedicado por tí, amigo. Un abrazo.
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