Los veo venir y sinceramente les temo más que a una vara verde. Forman
una especie de sevillanos que, eso sí, desde el afecto te enmiendan la plana en
cuanto a tu forma de vida actual se refiere y, a modo de apostilla y de manera
gratuita, te dan una serie de pronunciamientos de cómo procederían ellos en tu
lugar. Son, a que dudarlo, gente que en
la mayoría de los casos te tienen verdadero aprecio y que tratan de influir
“por tu bien” en que sometas tu “solitaria” vida a un proceso de Deconstrucción. Evidentemente nunca les
pides sus comentarios sino que ellos te los regalan de manera completamente
altruista. No comprenden que se pueda
ser feliz viviendo solo (estar solo
es algo bien distinto) y que no te replantees siquiera la posibilidad de darte
una vuelta (¡con lo bien que te mantienes!) por el Mercado del Amor. Las personas que viven solas en nuestro país
superan ya el treinta por ciento. Unos lo están motivados por las
circunstancias de la vida; otros por ser víctimas de su carácter o manera de
entender la sociabilidad y otros por haber comprendido que supone una forma de
vida bastante placentera y ajena a unas ciertas ataduras de convivencia. Resulta
evidente que la soledad (en sus aspectos anímicos más tristes) no es producto
de la ecuación espacio-personas sino de saberse incomprendido aún estando y
viviendo rodeados de gente. Lo que pretenden los “militantes” de la Deconstrucción Hispalense es que tú
lleves una vida similar a la de ellos. Empiezan su perorata con una declaración
de principios de cómo enfocarían ellos tu vida para que puedas alcanzar la felicidad
y la plena realización. Cuando los años ya empiezan a pesarte no es mala cosa
saber aprovechar al máximo cada día que Dios –o la Naturaleza- te regala. Pero cuando estás disfrutando placidamente de
un nuevo amanecer llegan “ellos” para joderte el día y recordarte que tienes
que cambiar tu actual Hoja de Ruta. Una especie de Deconstrucción al sevillano modo. Redentores irredentos de las
vidas ajenas. Un verdadero coñazo que,
desgraciadamente, van a más cada día.
Juan Luis Franco – Lunes Día
18 de Enero del 2016
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