Pan, amor y fantasía

Ayer, lunes 16 de Enero de 2023, falleció en Roma la gran actriz italiana Gina Lollobrigida. Tenía 95 años de edad y se configuraba como una de las últimas divas vivientes de la Edad de Oro del Cine Italiano. Junto a Sofía Loren y Claudia Cardinale formaron un trio de mujeres portentosas que situaron a la bella Italia en el epicentro de nuestras mayores pasiones juveniles. La familia de origen de Gina la configuraban su padre (un próspero fabricante de muebles), su madre y sus tres hermanas. Era lo que se podía considerar como una familia de clase media italiana. Los problemas surgieron cuando un bombardero aliado durante la Segunda Guerra Mundial destrozó literalmente el negocio familiar. Su aparición mediática  se produjo en 1947 durante el concurso de Miss Italia donde Gina consiguió el tercer puesto (el concurso lo ganó Lucía Bosé). Empezó su exitosa carrera cinematográfica en 1946 (“Águila negra”) y trabajó en el Séptimo Arte hasta los años setenta. A partir de su retirada del Cine se dedicó a la fotografía (con gran éxito) y a la escultura. Los directores y los actores con los que ha compartido rodajes la gran Gina produce una cierta sensación de vértigo. Fueron más de 33 galardones con los que fue premiada durante su exitosa carrera. Curiosamente y a pesar de sus más que notables interpretaciones nunca fue candidata al Oscar. Una prueba más que evidente de la fama que tenía “la Lollo” en Hollywood es que fue la elegida en 1961 para entregar a Billy Wilder el Oscar a la mejor dirección (“El Apartamento “). Con ella se va una forma de entender el Cine donde lo sentimental, el talento y la belleza caminaban cogidas armoniosamente de la mano. Obviemos por mezquino el trato que una cierta “prensa rosa” le dispensó en sus últimos años de existencia. El problema no es tan solo la falta de respeto (humano y artístico) hacia artistas que consiguen una alta longevidad, el problema es el regodeo perverso e inhumano del “coro de los grillos que cantan a la luna”. Se fue Gina y con ella se lleva una parte importante de nuestra cultura sentimental. Nos quedan sus películas, eternas y gloriosas, como muestras de su gran talento interpretativo y su gran carisma. Descanse en la paz de los elegidos para la Gloria.